• El miedo paraliza 

Sentimos esta sensación cada vez que enfrentamos algo desconocido. Lo nuevo siempre implica riesgo. Cuando inicias algún proyecto, todas las experiencias que adquieras serán inigualables, más allá del resultado. 

  • La rutina hace la monotonía 

Muchas veces sentimos que nuestra vida es monótona, que no nos sucede nada nuevo, pero eso cambia si se toma la decisión de hacer algo diferente que rompa esa rutina diaria y ver lo positivo en las pequeñas cosas. 

  • Concentrarse en el presente 

El pasado ya sucedió, intenta aprender de él, pero no te quedes anclado en ese tiempo.

El futuro es impredecible y no tiene sentido estar ansioso por lo que sucederá.

Concentrarse en el presente hará que enfrentemos el devenir de la vida. 

  • Ponerse en movimiento

Sentarse a ver pasar la vida no cambia lo que nos abruma. Si algo no nos gusta, mueve tus piezas de ajedrez e intenta tu mejor jugada.

  • Soñar con algo grande 

“Cuando un soñador mira el cielo, el otro lo señala con el dedo”. Siempre hay alguien que te diga que tus proyectos son utópicos e imposibles, pero los grandes inventos de la humanidad han sido realizados por personas que ignoraron lo imposible. 

  • No darse por vencido 

Lucha por lo que quieres y pon lo mejor de ti en el trayecto para concretar tus objetivos. Muchos han sido rechazados antes de llegar a la meta deseada. 

  • Focalizar el camino 

Escucha las opiniones de los demás, pero aprende a discernir aquellas que son sinceras y positivas y te dejan una enseñanza, de las otras que no te aportan nada. Siempre ten presente tu objetivo, más allá de las opiniones.

Yolanda Funes